Los productos y los servicios pensados para las personas con discapacidad suponen una parte muy importante de sus vidas, pues gracias a ellos se puede mejorar la autonomía o el bienestar. Dichos productos «diseñados para todos», en realidad suponen una mejora en la calidad global beneficiando no solo a personas con capacidades diferentes, sino la sociedad en su conjunto, siendo ésta cada vez más diversa.
Para analizar todo lo referente a la materia, la Mesa de Productos y Servicios, contó con la presencia de Nuria Aparicio, jefa de Relaciones Institucionales sobre Accesibilidad de Renfe; José Pérez, gerente de Comunicación Corporativa de Ford España, Nuria Gómez, directora de Desarrollo de Nuevo Negocio de Cecofar; Mari Satur Torre, directora de Innovación de la Fundación Vodafone; Ricardo Galán, director gerente de la Fundación Ayesa, y Laura Escalante, responsable de Sostenibilidad y Fundación Sanitas.
El transporte es una de las claves en la rutina de cualquier colectivo, incluido el de las personas con discapacidad. Nuria Aparicio explicó cómo es el plan de accesibilidad de Renfe, en el que no solo se contempla la adaptación en trenes y estaciones, sino también la de los productos y servicios que se ofrecen a los viajeros. El servicio Atendo, que facilita asistencia a las personas con discapacidad o movilidad reducida en 139 estaciones, es uno de los más valorados por los usuarios. Además, según explicó Nuria, otras de las líneas de trabajo de la compañía es la creación de aplicaciones informáticas que facilitan la compra de billetes y otras solicitudes.
José Pérez, de Ford, igualmente, insistió en la necesidad de un transporte adaptado para todos. La empresa automovilística española es pionera en su compromiso con la discapacidad gracias al Plan Adapta, a través del que poseen una flota de vehículos adaptados con la que visitan distintas ciudades españolas para que las personas con capacidades diferentes puedan probarlos. En total, sus coches se adaptan al 80 por ciento de las discapacidades. «Queremos que cualquier persona pueda conducir», explicó Perez. El último coche de Ford posee inversión de pedal y un asiento del copiloto monotorizado que puede convertirse en silla de ruedas.
El ámbito sanitario también protagonizó la Mesa de Productos y Servicios. Nuria Gómez narró que Cecofar, distribuidora farmacéutica corporativa, tiene como objetivo llegar a todas las personas con discapacidad, incluidas las que viven en zonas rurales, para lo que se ayudan del tejido farmacéutico. «Nadie tiene que emplear más de 30 minutos para llegar a una farmacia, queremos aprovechar esa proximidad para informarles de ayudas técnicas y de movilidad que pueden utilizar para su vida diaria», declaró. Para ello, proporcionan formación a los farmacéuticos para que puedan «detectar necesidades y ofrecer ayuda». Además, en un futuro próximo, Cecofar pondrá en marcha un proyecto de teleasistencia y telemedicina.
Precisamente la asistencia sanitaria a domicilio es uno de los servicios que ofrece Sanitas a sus clientes a través del Seguro Digital de Salud Blua, que posibilita analíticas a domicilio, entrega de medicamentos o rehabilitación. Laura Escalante explicó que trabajan «para hacer accesible el ámbito sanitario en todas sus facetas, desde «centros médicos adaptados a todos los colectivos a seguros privados de salud». Por otra parte, Sanitas, servicio médico oficial del equipo paralímpico español, lleva a cabo programas de deporte adaptados destinados a alumnos de educación privada para concienciar sobre la salud y la calidad de vida accesibles.
La tecnología ha abierto un mundo de posibilidades en cuanto a nuevos servicios, algo que han aprovechado muchas entidades para mejorar la atención y los productos dirigidos a las personas con discapacidad. Ricardo Galán reveló que la Fundación Ayesa, que se dedica al fomento de la innovación y a la integración laboral de personas con capacidades diferentes, ha desarrollado un producto para mejorar la movilidad de este colectivo en las cuestiones rutinarias. De nombre Seter APP, y realizado en colaboración con Autismo Sevilla, posibilita que una persona pueda coger un autobús con toda seguridad, avisando de tiempos, paradas, llegada al destino… Además, están trabajando en una plataforma online para que personas con discapacidad puedan trabajar y vender sus productos sin necesidad de desplazarse.
Por su parte, Mari Satur Torre, explicó que en Vodafone, la idea clave es que la tecnología puede formar y generar oportunidades, llegando a superar retos sociales. Uno de esos retos, concretó, es generar la igualdad al acceso de productos y servicios para personas con discapacidad y de edad avanzada. Para ello, han generado determinados servicios que convierten a las tablets y a los teléfonos móviles en dispositivos todoterreno que se transforman en terminales de teleasistencia, y ofrecen herramientas para las tareas diarias. «Normalizamos la discapacidad, porque no llevas ningún dispositivo extraño, y eliminamos barreras», aseguró.
De otro lado, colaboran con varias entidades para que la tecnología se use en formación y educación, y trabajan en incorporar intermediación en lengua de signos y puestos de atención adaptados en las tiendas de la compañía.
La autonomía de las personas con discapacidad se articula a través de unos servicios de movilidad accesibles. En eso estuvieron de acuerdo todos los ponentes, que insistieron en la libertad que supone poder comportarse de manera autónoma en todos los ámbitos. «Muchas veces no somos conscientes de que la movilidad es un elemento básico en la vida de todos», recordó Nuria Aparicio, que aportó su propia experiencia: «Cuando llegué a Madrid no podía asegurar una puntualidad en mi trabajo, tenía que esperar a un autobús adaptado, ahora las cosas han avanzado bastante». José Pérez dio cuenta de ese progreso, poniendo como ejemplo el coche más sofisticado adaptado por Ford en colaboración con Ilunion: un vehículo con joysticks para un chico que no tiene brazos y lo maneja con los pies. «Poder conducir le ha cambiado la vida», explicaba Pérez, que avisó que el futuro «se dirige hacia los coches autónomos».
También Ricardo Galán opinó que los avances en movilidad van a ir irremediablemente unidos a los tecnológicos. «La tecnología nos está cambiando los hábitos de vida, y está ayudando a que las personas con discapacidad tengan mayor facilidad para desenvolverse en la vida diaria», explicó. «Una persona con pulseras conectadas a internet, y con acceso a mapas que incluyan barreras arquitectónicas, podrá moverse perfectamente por la ciudad, y eso lo vamos a ver a medio plazo», auguró Galán.
Mari Satur Torre puso como ejemplo de avance tecnológico un producto de apoyo creado para las personas con movilidad muy reducida, Eva Facial Mousse, que posibilita que todo tipo de usuarios puedan manejar su tablet o móvil, ya que se utiliza moviendo la cabeza. «El móvil se adapta a la persona con discapacidad, lo que abre mucho las posibilidades», aseguró.
Respecto a la sanidad, tanto Nuria Gómez como Laura Escalante se mostraron de acuerdo en que la tecnología también ayuda a los avances sanitarios y en lo importante que es dar a conocer la existencia de dichos progresos a los potenciales usuarios. «Por eso creemos que es importante la labor del farmacéutico, es el personal sanitario más cercano», insistió Nuria. «Pretendemos ayudarles, que sepan que hay cosas que pueden comprar en las farmacias, y van desde lo más sencillo, como un abretarros, a una banqueta para adaptar un baño temporalmente». Por su parte, Laura Escalante contó que Sanitas se ayuda del movimiento asociativo y de las ventajas que ofrece la accesibilidad de sus centros para que las personas con discapacidad conozcan los avances sanitarios.
De otro lado, se llamó la atención sobre la discapacidad adquirida, que afecta sobre todo a las personas mayores. «Hay que usar los medios tecnológicos y sanitarios para retrasar todo lo posible la dependencia total y potenciar el envejecimiento activo», sentenció Nuria Gómez.